Las causas de la desnutrición son muchas. Se las puede agrupar en tres grandes grupos:
INGESTA INSUFICIENTE DE NUTRIENTES: consecuencias de enfermedades,
o condiciones de extrema pobreza, cuando la ingesta es insuficiente o inadecuada.
PÉRDIDA DE NUTRIENTES: mala digestión o mala absorción de los alimentos, por disminución de la producción de enzimas digestivas (elementos que ayudan a la digestión de los alimentos) o por enfermedades intestinales hepáticas.
AUMENTO DE LAS NECESIDADES METABÓLICAS: algunas enfermedades producen un aumento en el metabolismo, con un mayor consumo de energía (por ejemplo, la cirrosis, o enfermedad degenerativa del hígado, y el cáncer).
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